Juguetes para irse de viaje

Unas cartas muy especiales...

¿Sabéis ese momento de aburrimiento en verano en el no sabéis qué hacer y os ponéis a jugar a las cartas? Pues vas a preferir esto antes que el UNO. Un juego con tantas posturas diferentes que vais a acabar totalmente exhaustos cuando terminéis la partido, pero más que satisfechos. Porque en este juego… ¡nadie pierde!

¿Seguro que no es un pintalabios?

Posiblemente cuando uses el pintalabios cogerás sin querer el vibrador, y cuando quieras usar el vibrador cogerás sin querer el pintalabios… ¡son casi idénticos! Con lo portátil que es lo puedes llevar a cualquier parte, en el bolso mismo sin preocuparte por si alguien lo ve. A este juguete discreción no le falta, y vibración tampoco. Puedes usarlo cuando estés sola, pero, por supuesto, en pareja también.

¡Toca remojarse!

Esta vez te recomendamos tener una bañera a mano ;) Imagínate… un hotel romántico, con una habitación pensada para vosotros y una bañera enorme en la que cabéis perfectamente los dos. Pues a eso añádeles estas sales de baño con aroma a lotus. Súper relajante y perfectas para crear vuestro propio mundo en un lugar completamente diferente al que estáis acostumbrados.

Un sabor de cine

¡Besos besos y más besos! No podréis parar, básicamente porque aparte de proporcionaros vibraciones (como si fuera un pequeño cosquilleo) este “brillo de labios” tiene un delicioso sabor a palomitas dulces. De verdad, en cuanto terminéis os van a entrar ganar de ir al cine. 

Fresa... Chocolate... mmmmmmmmmm

El dulce nos va a todos. Tienes fresa, chocolate y su cuerpo entero. ¿Qué más se puede pedir? Lamerás cada centímetro, aunque… si te animas antes puedes incluso ponerte a dibujar sobre ella. Lo hagas como lo hagas, os vais a quedar más que satisfechos. Seguramente cuando venga el servicio de habitaciones a limpiar, se van a pensar que os habéis hecho una foundie encima de la cama.